Camino del mollar,
recuerdo que te vi,
mi linda morenita,
toda mi ilusión.
Y tu amor silvestre,
deseo del aire,
hoy es un abrojo
prendido a mi copla.
Resplandor de zamba,
vuelve con la tarde.
Challar del corazón
tan sólo para ti,
el rumbo a yerba buena
que lleva tu piel.
Y en los ojos tuyos,
coyuyos de mi alma,
yo colgué mi canto
sentido y trovero.
Por mi pensamiento,
por tu pensamiento.
Era tu pañuelo
dueño de mis ansias,
arrullaba el fuego,
paloma de ayer.
Algarroba mi alma,
tu recuerdo llenito de añapa.
Resplandor de zamba,
vuelve con la tarde.
Me fui por el verano,
libre, sin pensar,
porque será la forma
triste del adiós.
Duele no volver
y esa espina en el pecho,
ave peregrina,
silvestre deseo.
Agüita de acequia,
cielo de febrero.
Cualquier atardecer
te encontraré en la luz,
camino del mollar,
maduro resplandor.
Y una sensación
detenida en el tiempo,
senda de mi vida,
promesa del viento.
Por mi pensamiento,
por tu pensamiento.
Era tu pañuelo
dueño de mis ansias,
arrullaba el fuego,
paloma de ayer.
Algarroba mi alma,
tu recuerdo llenito de añapa.
Resplandor de zamba,
vuelve con la tarde.