Muchacita caprichosa, yo no comprendo este extraño amor, es que te amo ciegamente y tu ni en cuenta con mi pasión.
Ya te he dicho que te amo, y aunque padeces de frió, siempre rechazas mi abrigo, no dejas mostrarte mi corazón.
Y esa forma de quererte está acabando conmigo, amarte y no tenerte, me duele, me duele, ay, que gran dolor.
Soy esclavo de tu amor, si tu quisieras puedo dar la vida, por tu amor, lo sabe Dios, que tu a quien quieres se que te humilla.
Mi Virgen de Guadalupe, no hagas mas largo este sufrimiento, pues la vida es un tormento sin su cariño y sin su calor.
(Gracias a ? por esta letra)