Que la vida iba en serio
uno lo empieza a comprender más tarde.
Como todos los jóvenes, yo vine

a llevarme la vida por delante.
Dejar huella quería
y marcharme entre aplausos.
Envejecer, morir, eran tan sólo
las dimensiones del teatro.
Pero ha pasado el tiempo
y la verdad desagradable asoma:
envejecer, morir,
es el único argumento de la obra.

Comments