Ese niño que fuí yo, que se parece tanto a ti,
que quería ser mayor para escapar, para elegir,
potro del sur, ebrio de luz,
aprendiz de jugador,
el mundo no era mas que un imposible Rock & Roll:
Misa de doce, patio de un cuartel,
oveja negra. Niños bien
todo estaba decidido, regulado.
Nadie daba opción
a los chavales como yo.
Ese hombre que soy yo, que se parece tanto a ti,
aún conserva en su interior algo del niño aquel que fuí.
Ese mismo corazón, loco por deshojar
la margarita del azar.
Al igual que tu,
si me mantengo a flote ha sido porque
nunca he dejado de nadar.
Aprendiendo a vivir,
aprendiendo a saber decir que no,
aprendiendo a sufrir
la saliva de la incomprensión,
aprendiendo vivir
en este siglo feroz,
Aprendiendo seguir
contra viento y marea siendo yo.
Ese mismo corazón, loco por deshojar
la margarita del azar.
Al igual que tu,
si me mantengo a flote ha sido porque
nunca he dejado de nadar.
Aprendiendo a vivir,
a coger en marcha ese autobús,
aprendiendo a leer
en los ojos de la multitud,
aprendiendo a vivir
amando contra reloj,
aprendiendo a seguir
el compás de la imaginación.
Aprendiendo a vivir,
aprendiendo a saber decir que no,
aprendiendo a sufrir
la saliva de la incomprensión,
aprendiendo vivir
en este siglo feroz,
Aprendiendo seguir
contra viento y marea siendo yo.
Aprendiendo a vivir,
Aprendiendo a vivir,
Aprendiendo a vivir