Sin hablar te presiento y puedo imaginar,
por aquí todo me recuerda a ti.
Puedo oír de tu corazón al mío
que mi canción va a abrazándonos la piel.
Nada igual, tu amor es todo en esta soledad,
es el silencio, el tiempo que se va,
es el rocío en el cristal.
Estás aquí conmigo,
mírame, voy a entregarte el corazón,
y esta manera de quererte así,
entre el delirio y la razón.
Estás aquí conmigo,
sálvame, que hoy en el nombre del amor,
la primavera deshojó el abril
y ya no puedo estar sin ti.
Puedo ver en invierno rosas florecer,
sin adiós, descubriéndonos la piel.
Donde voy la distancia más me aferra a ti,
es amar, en lo ausente descubrir.
Nada igual, tu amor es todo en esta soledad,
es el silencio, el tiempo que se va,
es el rocío en el cristal.
Estás aquí conmigo,
mírame, quiero entregarte el corazón,
y esta manera de quererte así,
entre el delirio y la razón.
Estás aquí conmigo,
sálvame, que hoy en el nombre del amor,
la primavera deshojó el abril
y ya no puedo estar sin ti.
El cielo, enrojecido el firmamento,
el fuego en cada nuevo regresar,
la noche acompañando mi desvelo,
mis pasos a la par, mi credo y mi verdad.
Estás aquí conmigo,
mírame, voy a entregarte el corazón,
y esta manera de quererte así,
entre el delirio y la razón.
Estás aquí conmigo,
sálvame, que hoy en el nombre del amor,
la primavera deshojó el abril
y ya no puedo estar sin ti.
Y ya no puedo estar sin ti…
Sin ti.
(Gracias a je por esta letra)