Preso me encuentro tras de la reja
tras de la reja de mi prisión
cantar quisiera, llorar no puedo
las tristes quejas del corazón
Si no es la barca ni la falúa
lo que me espera en el ancho mar
es el terrible San Juan de Ulúa
donde mis culpas voy a pagar
Una mañana salí a jurado,
Ay cielo santo, lo que pasó
el veredicto deliberado
como a un culpable me condenó
Pena de muerte pedía el agente
ay, cielo santo, lo que sentí
y lo confieso sinceramente
que como un niño me estremecí.
Hace tres días que la bartolina
un pajarito vino a cantar
era mi madre que en forma de ángel
a su hijo amado vino a llorar
Cuando haya muerto, y entre los mares,
Vayan mis restos a descansar
Una plegaria pa el sentenciado
Que fué asesino de tanto amar