Es testigo ejemplar de muchas historias,
algunas verdades y tantas mentiras.
Fue pionero en saber
lo que te quería,
testigo del beso
que hoy te recuerdo.
Aquí descansa Raquel
paseando a sus perros,
camino de casa, todas las mañanas.
Luego se sienta Jesús
pensando en su vida,
cantando en rincones
tan llenos de arte.
En este banco apareció
la nostalgia de un amor
rascada con tijeras.
La parte izquierda se quemó
con la fogata de un señor
que se dormió a tu vera.
Regresé al banco y me senté,
recordé momentos que olvidé
junto a mí te veo, junto a ti
me siento y hoy sentí en el banco.
Aquí durmió Ramón,
vecino de Antonio,
comiéndose el frío
de las madrugadas.
Un cobarde rompío
algunas maderas de los espaldares
que aguantan tu espalda.
En este banco se pintó
un corazón partido en dos
con varias iniciales.
La parte izquierda se quemó
con la fogata de un señor
que no tenía modales.
Regresé al banco y me senté,
recordé momentos que olvidé
junto a mí te veo, junto a ti
me siento y hoy sentí en el banco.
Es testigo ejemplar...
Regresé al banco y me senté,
recordé momentos que olvidé
junto a mí te veo, junto a ti
me siento y hoy sentí en el banco.
Regresé al banco y me senté,
recordé momentos que olvidé
junto a mí te veo, junto a ti
me siento y hoy sentí en el banco.
Es testigo ejemplar...
(Gracias a Laurita por esta letra)