Tanto dar vueltas
tanto girar,
tantas preguntas
tanto buscar.
Para qué.
Si no te importa nada,
sólo quieres estar
bajo su suave luz
y respirar.
Tantos países
tantas canciones,
tantos amantes,
grandes pasiones.
Para qué.
Si ya desde un principio
supiste al ver sus ojos
que no había remedio,
que aquel era tu sitio.
Te hizo volver a casa,
abrió todas las puertas
y el río de su amor
pasó por ellas.