A las puertas de la gloria
llegó Pastora a llamar
y San Pedro emocionado
las abrió de par en par.
¿De dónde es usted señora?
- De Sevilla, casi ná
andaluza y española...
y gitana aceituná.
Me llamo Pastora Imperio
pa lo que guste mandar.
Tenía los ojos verdes,
y los tengo que la mar
por mucho que rice el rizo
verde que verde será.
¿Y usted qué vende?, ¿qué quiere?
¿que sabe hacer? pues verá:
sé llevar una mantilla
y una bata almidoná
y moviendo los pinreles
nunca he perdido el compás.
Dicen que si soy antigua
de una España trasnochá,
y yo me rio lo mío, de eso
de la antigüedad.
Porque levanto los brazos
y me pongo revelá
diciendo por lo bajini
al que lo quiera escuchá:
estribillo
Como la Giralda mora
Pastora no tie edad
como la Torre del Oro
y el palacio de San Telmo
Pastora no tiene edad.
Porque perdí los papeles
en una juerga real
entre Isabel y Fernando
En la Granada Imperial...
y no hay taco de almanaque
que lo pueda desmotrar
Ea, que no,
que Pastora Imperio
ni quiere ni tiene edad.
Que Pastora
Pastora, Pastora,
Pastora Imperio
Ni quiere ni tiene edad.